En las noches de verano
sillas afuera ganabamos la calle;
la brisa jugaba al elastico
en la vereda.
El amanecer nos encontraba en la terraza
colchones afuera
mirando el resplandor.
El calor entraba al cuarto sin permiso.
Habia una pileta de lona verde arriba
y habia un despintado tobogán adentro;
habia un turno para tirarse
para el que no durmio la siesta,
habia que portarse bien en la comida
y habia que esperar despues de la comida.
En este homenaje al recuerdo
envidio hoy la felicidad de aquellos días.
Coty Waizer
No hay comentarios:
Publicar un comentario